lunes, 30 de septiembre de 2019

Niveles de exposición de las novedades de prensa


Si bien nuestra función, como agentes de prensa, es darles visibilidad a las novedades o temas de empresas, instituciones y personas, a través de los medios, sabemos que no todos los asuntos tienen el mismo alcance o despiertan el mismo interés por parte de la llamada “opinión pública”.

Algunos de los temas que difundimos sabemos que pueden captar un porcentaje interesante de gente, otros asuntos son mas bien aplicables a sectores muy específicos. Y también hay temas que son netamente institucionales, por lo que, más allá del rubro, el alcance será realmente más acotado.  

Resulta evidente que las estrategias de difusión y el trabajo y seguimiento que se aplicará para esos temas diferentes serán muy distintas entre sí. Por eso, también, parte del trabajo de un agente de prensa es sopesar esa novedad que nos llega y planificar el alcance que se buscará con ella.

Si tenemos un tema que entendemos puede tener buen alcance, debido a que es un servicio o producto novedoso, o que puede ser de utilidad para muchas personas, seguramente armaremos un mapa de medios más ambicioso, tomando en cuenta diferentes rubros de medios aplicables.

Y también, luego del diseño de difusión, le daremos un seguimiento fuerte, lo que implica llamados semanales a algunos periodistas clave. Por lo menos lo haremos hasta conocer su interés o desinterés en el tema (lógicamente nuestro cálculo previo no es una certeza sino un acercamiento). 

Por ejemplo, si una empresa de plásticos, crea un nuevo material o producto hecho con plástico reciclado, entendemos que se trata de un tema de amplio alcance. Le acercaremos la noticia a medios de Interés general, sustentabilidad, negocios y posiblemente algunos específicos de la industria del plástico.

Ahora, si en cambio la noticia es que dicha empresa tiene un nuevo logo o imagen de marca, su alcance será menor. Eso no significa que no sea un tema a comunicar, pero sí que deberemos comenzar conociendo su alcance, para evitar tres inconvenientes: generar expectativas que no se puedan cumplir, atosigar a periodistas con un tema que no puede salir en cualquier medio y desgastar nuestro vínculo con la prensa a través de temas de poco interés.   

En algunos casos, también, como asesores de prensa deberemos decirle al cliente que cierto  tema no vale la pena difundirlo en los medios. En ese sentido, hay temas, como puede ser el anterior del logo, que a través de la publicidad y/o las redes sociales es posible que obtenga mejores resultados.

Como agentes de prensa muchas veces nos ocurre que, aunque un tema no sea de gran trascendencia para un cliente, nosotros lo vemos como una buena oportunidad. El olfato para esos temas es muchas veces lo que distingue a un asesor de prensa con capacidad periodística de uno que no la tiene tanto.

En síntesis, si bien la mayoría de los temas, bien enfocados, pueden ser prensables, no todos tienen la misma potencialidad. El poder explicarle al cliente esto, y a la vez diseñar una estrategia acorde a dicha potencialidad (sin buscar más ni menos que su alcance), es parte del trabajo de prensa.